Agarponis Personata

El agapornis personata en una de las especies de agapornis más queridas del mundo, y es que siendo un ave tan hermosa, tranquila y cariñosa, quien no desearía tenerla en casa como compañera inseparable.

Taxonomía del Agarponis Personata

¿De dónde proviene ésta ave?

Ésta ave fue descubierta en África Oriental, exactamente en Tanzania en el año 1.887, por un grupo de exploradores y naturalistas que visitaron las sabanas de esa zona, encontrándose a éste bello pájaro que vivía en pequeños grupos y que cautivó a todos por su apariencia.

Su nombre agapornis es el resultado de la composición de dos palabras, una es ágape que significa amor y la otra es ornis, que quiere decir pájaro. Por esta razón esta especie que también se le conoce en distintos países como agapornis común o pájaro enmascarado, en ocasiones muchas personas lo llaman el ave del amor.

¿Cómo es el agapornis personata?

Ésta especies de agapornis es una de las más pequeñas, llegando a medir en promedio tan solo 15 centímetros.

La característica que lo identifica es el color de su cabeza y cara, los cuales son de una tonalidad negruzca, su pico es rojo brillante y sus ojos están rodeados de un anillo grande y totalmente blanco, contrastando todo muy bien con el color de su cara, haciendo parecer que lleva puesto algún tipo de mascara.

Su pecho y su cuello son de color amarillento al igual que su nuca, aunque en ocasiones éstas zonas pueden presentar una tonalidad naranja. Sus patas son muy fuertes, robustas y de un color gris claro.

Las alas son de un color verde intenso con las plumas primarias en color negro con borde amarillo, su cola combina el negro y el verde en la parte superior y el amarillo en las puntas.

También se pueden conseguir agapornis personata en tonalidades azules, grises o violetas, todas éstas como resultado de diferentes mutaciones hechas por los humanos.

¿Cómo es su cuidado?

Antes de todo es importante saber que si tienes pensado adquirir más de un agapornis personata, todos debe estar emparejado, ya que ésta ave tiende a ser algo territorial con las especies de su mismo género, sobre todo en las épocas de reproducción, llegándose a tornar un poco agresiva.

A pesar de que el agapornis presenta ese carácter cuando está en ese tipo de situaciones, por lo general su temperamento es muy tranquilo, cariñoso y amoroso tanto con su pareja, como con su criador. También es muy juguetón por lo que es muy recomendable que interactúes con él, colocándole juguetes dentro de la jaula y enseñándole algunos trucos, esto lo pondrá muy feliz.

Su dieta está basada en todo tipo de semillas que no contengan grandes cantidades de grasas, aunque en ocasiones podrás ponerle pequeños trozos de verduras y frutas sin ningún problema, solo debes cerciorarte de que estén bien limpias y frescas.

Si ya te has ganado su confianza por completo, sácalo muy a menudo de su jaula para que se estire y explore la habitación o distintos lugares de la casa, al principio se sorprenderá un poco, pero con el tiempo se acostumbrará y verás lo cómodo que se sentirá al salir de su jaula.

Generalmente el macho es más sociable que la hembra, por lo que en ocasiones tendrás que ser más paciente y sacarlos de la jaula en el momento adecuado.

Un agapornis personata bien cuidado en cautiverio puede alcanzar los 15 años de vida, siendo ésta una de las especies de agapornis más longevas.